Hoy retomo mi literatura sobre 17 cimas. Mi reto montañero. Como estoy lesionado de mi gemelo izquierdo, tengo tiempo para escribir, así que voy a describiros tres de las cuatro cimas que intenté subir este verano pasado.
El pasado 20 de Junio por la mañana, y sin madrugar mucho, pues la ruta es corta, nos despertamos mi compañero de trabajo Antonio y yo en el Camping de Santo Domingo de la Calzada. Nos preparamos, nos dimos un buen desayuno, y nos dirigimos alrededor de media hora por la carretera que va hacia la estación de esquí de Valdezcaray. Es una estación bastante pequeña, ni siquiera tiene donde alojarse, pues muy cerquita, en el valle se encuentra Ezcaray, que es un pueblo bastante majo. Lo que sí tiene son unas pistas con una inclinación considerable, pues salvan un desnível considerable.
LLegamos al gran aparcamiento de la estación de esquí, dejamos el coche, y ya vemos el pico del San Lorenzo. Si el día está despejado no tiene pérdida ninguna. Todo el circo que hay que subir hasta la cima está claro, pero lo más fácil es subir por las pistas de esquí, aunque sea más aburrido. El circo por el cual subimos tiene varias plataformas, donde acaban varios telesillas, pero hasta que no se llega a estas plataformas, no se vé bien la pista a seguir.
Lo más fácil es dejar el coche y subir hasta la primera plataforma, y desde allí seguir por la pista que está más a nuestra izquierda. Esta pista nos llevará a la cresta de la montaña. Una vez en ella, nos dirigimos por la cresta hacia la derecha. Os pongo un plano de pistas, y unas fotos para que os deis cuenta. Si os fijais en el plano de pistas, sería subir por las pistas azules G y luego seguir por la J.
